Crisis y empleo

Como es bien sabido, las crisis son duras pero ofrecen oportunidades valiosas. En el caso de la economía, permiten hacer una "limpieza" de las actividades productivas, trasladando recursos a las empresas que hagan mejor uso de ellos. Sin embargo, sucede que no es políticamente correcto decir que es bueno para el país que desaparezcan ciertos empleos; más bien, se quiere asegurar el trabajo de algunos a toda costa. Y es aquí donde corresponde preguntarse si lo importante es el trabajador o el empleo, pues de ahí se desprende a quien queremos proteger.

Hago un llamado a las autoridades a ser responsables con el futuro y los recursos del país, tomando decisiones que contribuyan a "aceitar" (es decir, permitir una veloz redistribución de los recursos) la economía, y no entramparla con regulaciones de buena intención pero de pobres resultados.